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EL CULTIVO DEL PEPINO
2. EXIGENCIAS DE CLIMA Y SUELO3. ELECCIÓN DEL MATERIAL VEGETAL
7.2.1. Enfermedades producidas por hongos
7.2.2. Enfermedades producidas por bacterias
8.1. QUEMADOS DE LA ZONA APICAL DEL PEPINO
8.3. CURVADO Y ESTRECHAMIENTO DE LA PUNTA DE LOS FRUTOS
Familia: Cucurbitaceae.
Nombre científico: Cucumis sativus L.
Planta: herbácea anual.
Sistema radicular: es muy potente, dada la gran productividad de esta planta y consta de raíz principal, que se ramifica rápidamente para dar raíces sencundarias superficiales muy finas, alargadas y de color blanco. El pepino posee la facultad de emitir raíces adventicias por encima del cuello.
Tallo principal: anguloso y espinoso, de porte rastrero y trepador. De cada nudo parte una hoja y un zarcillo. En la axila de cada hoja se emite un brote lateral y una o varias flores.
Hoja: de largo peciolo, gran limbo acorazonado, con tres lóbulos más o menos pronunciados (el central más acentuado y generalmente acabado en punta), de color verde oscuro y recubierto de un vello muy fino.
Flor: de corto pedúnculo y pétalos amarillos. Las flores aparecen en las axilas de las hojas y pueden ser hermafroditas o unisexuales, aunque los primeros cultivares conocidos eran monoicos y solamente presentaban flores masculinas y femeninas, y en la actualidad todas las variedades comerciales que se cultivan son plantas ginoicas, es decir sólo poseen flores femeninas que se distinguen claramente de las masculinas porque son portadoras de un ovario ínfero.
Fruto: pepónide áspero o liso, dependiendo de la variedad, que vira desde un color verde claro, pasando por un verde oscuro hasta alcanzar un color amarillento cuando está totalmente maduro, aunque su recolección se realiza antes de su madurez fisiológica. La pulpa es acuosa, de color blanquecino, con semillas en su interior repartidas a lo largo del fruto. Dichas semillas se presentan en cantidad variable y son ovales, algo aplastadas y de color blanco-amarillento.
2. EXIGENCIAS DE CLIMA Y SUELO
El manejo racional de los factores climáticos de forma conjunta es fundamental para el funcionamiento adecuado del cultivo, ya que todos se encuentran estrechamente relacionados y la actuación sobre uno de estos incide sobre el resto.
Es menos exigente en calor que el melón, pero más que el calabacín o calabaza italiana
Etapa de desarrollo |
Temperatura (ºC) |
|
Diurna |
Nocturna |
|
Germinación |
27 |
27 |
Formación de planta |
21 |
19 |
Desarrollo del fruto |
19 |
16 |
Las temperaturas que durante el día oscilen entre 20 ºC y 30 ºC apenas tienen incidencia sobre la producción, aunque a mayor temperatura durante el día, hasta 25 ºC, mayor es la producción precoz. Por encima de los 30 ºC se observan desequilibrios en las plantas y temperaturas nocturnas iguales o inferiores a 17 ºC ocasionan malformaciones en hojas y frutos. El umbral mínimo crítico nocturno es de 12 ºC y a 1ºC se produce la helada de la planta.
El empleo de dobles cubiertas en invernaderos tipo parral supone un sistema útil para aumentar la temperatura y la producción del pepino.
Es una planta con elevados requerimientos de humedad, debido a su gran superficie foliar, siendo la humedad relativa óptima durante el día del 60-70 % y durante la noche del 70-90 %. Sin embargo, los excesos de humedad durante el día pueden reducir la producción, al disminuir la transpiración y en consecuencia la fotosíntesis, aunque esta situación es infrecuente.
El pepino es una planta que crece, florece y fructifica con normalidad incluso en días cortos (con menos de 12 horas de luz), aunque también soporta elevadas intensidades luminosas y a mayor cantidad de radiación solar, mayor es la producción.
El pepino puede cultivarse en cualquier tipo de suelo de estructura suelta, bien drenado y con suficiente materia orgánica.
Es una planta medianamente tolerante a la salinidad (algo menos que el melón), de forma que si la concentración de sales en el suelo es demasiado elevada las plantas absorben con dificultad el agua de riego, el crecimiento es más lento, el tallo se debilita, las hojas son más pequeñas y de color oscuro y los frutos obtenidos serán torcidos. Si la concentración de sales es demasiado baja el resultado se invertirá, dando plantas más frondosas, que presentan mayor sensibilidad a diversas enfermedades.
El pH óptimo oscila entre 5,5 y 7.
3. ELECCIÓN DEL MATERIAL VEGETAL
Principales criterios de elección:
Características de la variedad comercial.
Exigencias del mercado de destino.
Estructura de invernadero.
Suelo.
Clima.
Calidad del agua de riego.
Los aspectos fundamentales a tener en cuenta para elegir una variedad que se adapte a las condiciones de cultivo y al gusto del consumidor son:
Producción comercial, que debe ser lo más alta posible.
Vigor de la planta, de forma que un buen vigor permite un ciclo largo y una buena tolerancia a las bajas temperaturas y al acortamiento de los días.
Buen nivel de resistencia a enfermedades (ej: Mildiu, oidio, etc.).
Longitud de fruto, que debe ser estándar (mínima de 30 cm y máxima de 38 cm) y estable frente a las diferentes condiciones de cultivo.
Firmeza y conservación del fruto, que debe ser adecuada para resistir el transporte y mantenerse el tiempo suficiente en el mercado en óptimas condiciones.
Otros aspectos que pueden considerarse para la elección son la precocidad y las características del fruto (longitud, color, estrías, etc.).
La mayor parte de las variedades cultivadas de pepino son híbridas, habiéndose demostrado su mayor productividad frente a las no híbridas. Se pueden englobar en los siguientes tipo:
Pepino corto y pepinillo (“tipo español”). Son variedades de fruto pequeño (longitud máxima de 15 cm), de piel verde y rayada de amarillo o blanco. Se utilizan para consumo en fresco o para encurtido, en este caso recolectándolos más pequeños. Las variedades pueden ser monoicas, ginoicas con polinizador y ginoicas partenocárpicas.
Pepino medio largo (“tipo francés”). Variedades de longitud media (20-25 cm), monoicas y ginoicas. Dentro de estas últimas se diferencian las variedades cuyos frutos tiene espinas y las de piel lisa o minipepinos (similares al “tipo Almería”, pero más cortos), de floración totalmente partenocárpica.
Pepino largo (“tipo Almería”). Variedades cuyos
frutos superan los 25 cm de longitud, ginoicas, de frutos totalmente
partenocárpicos y de piel lisa, más o menos asurcada. El tamaño de las
hojas es mucho más grande.
Puede realizarse siembra directa sobre el suelo o llevar las semillas al semillero en caso de que hubiera peligro de pérdidas en nascencia por las condiciones ambientales o por la presencia de topos, ratones, pájaros u otros.
En pepino “tipo Almería” se realiza a los pocos días del trasplante debido al rápido crecimiento de la planta, con la eliminación de brotes secundarios y frutos hasta una altura de 60 cm.
En pepino “tipo Almería” se suprimirán todos los brotes laterales para dejar la planta a un solo tallo. Para los restantes tipos de pepino la poda es muy similar, aunque no se eliminan los brotes laterales, sino que se despuntan por encima de la segunda hoja.
Se suprimirán las hojas viejas, amarillas o enfermas. Cuando la humedad es demasiado alta será necesario tratar con pasta funguicida tras los cortes.
Los frutos curvados y abortados deben ser eliminados cuanto antes, al igual que aquellos que aparecen agrupados en las axilas de las hojas de algunas variedades, dejando un solo fruto por axila.
Es una práctica imprescindible para mantener la planta, mejorando la aireación general de la planta y favoreciendo el aprovechamiento de la radiación y la realización de las labores culturales (destallados ,recolección, etc.). Todo ello repercutirá en la producción final, calidad del fruto y control de las enfermedades.
La sujeción suele realizarse con hilo de polipropileno (rafia) sujeto de una extremo a la zona basal de la planta (liado, anudado o sujeto mediante anillas) y de otro a un alambre situado a determinada altura por encima de la planta. Conforma la planta va creciendo se va liando o sujetando al hilo tutor mediante anillas, hasta que la planta alcance el alambre. A partir de ese momento se dirige la planta hasta otro alambre situado aproximadamente a 0,5 m, dejando colgar la guía y uno o varios brotes secundarios.
Para cultivos tempranos con intención de quitarlos pronto para realizar un cultivo de primavera, los marcos suelen ser más pequeños (1,5 m x 0,4 m ó 1,2 m x 0,5 m).
Si el cultivo es más tardío o se pretende alargar la producción cubriendo los meses de invierno, habrá que ampliar los marcos para reducir la densidad de plantación, con el fin de evitar la competencia por la luz y proporcionar aireación.
En los cultivos protegidos de pepino en Almería el aporte de agua y gran parte de los nutrientes se realiza de forma generalizada mediante riego por goteo y va ser función del estado fenólogico de la planta así como del ambiente en que ésta se desarrolla (tipo de suelo, condiciones climáticas, calidad del agua de riego, etc.).
En cultivo en suelo y en enarenado el establecimiento del momento y volumen de riego vendrá dado básicamente por los siguientes parámetros:
Tensión del agua en el suelo (tensión mátrica), que se determinará mediante un manejo adecuado de tensiómetros.
Tipo de suelo (capacidad de campo, porcentaje de saturación).
Evapotranspiración del cultivo.
Eficacia de riego (uniformidad de caudal de los goteros).
Calidad del agua de riego (a peor calidad, mayores son los volúmenes de agua, ya que es necesario desplazar el frente de sales del bulbo de humedad).
Tabla 2. Consumos medios (l/m2.día) del cultivo de pepino “tipo Almería” en invernadero. Fuente: Documentos Técnicos Agrícolas. Estación Experimental “Las Palmerillas”. Caja Rural de Almería.
MESES |
AGOSTO |
SEPT. |
OCT. |
NOV. |
DIC. |
ENERO |
FEB. |
|||||||
Quincenas |
1ª |
2ª |
1ª |
2ª |
1ª |
2ª |
1ª |
2ª |
1ª |
2ª |
1ª |
2ª |
1ª |
2ª |
A |
1,63 |
2,95 |
3,68 |
3,80 |
4,21 |
3,39 |
2,40 |
2,04 |
1,78 |
1,41 |
1,19 |
1,31 |
1,53 |
1,69 |
B |
1,48 |
2,75 |
3,04 |
3,51 |
3,39 |
2,40 |
2,04 |
1,94 |
1,41 |
1,19 |
1,31 |
1,53 |
1,69 |
|
C |
1,38 |
2,28 |
2,81 |
2,83 |
2,40 |
2,04 |
1,94 |
1,41 |
1,46 |
1,31 |
1,53 |
1,69 |
||
D |
1,14 |
2,11 |
2,26 |
2,00 |
2,04 |
1,94 |
1,41 |
1,46 |
1,31 |
1,53 |
1,69 |
|||
E |
1,05 |
1,70 |
1,60 |
1,70 |
1,94 |
1,55 |
1,46 |
1,61 |
1,53 |
1,69 |
A: siembra o trasplante 1ª quincena de agosto; B: siembra o trasplante 2ª quincena de agosto; C: siembra o trasplante 1ª quincena de septiembre; D: siembra o trasplante 2ª quincena de septiembre; E: siembra o trasplante 1ª quincena de octubre.
Existe otra técnica empleada de menor difusión que consiste en extraer la fase líquida del suelo mediante succión a través de una cerámica porosa y posterior determinación de la conductividad eléctrica.
En el pepino “tipo Almería” es muy importante mantener un nivel de humedad constante y elevado en el suelo, para un desarrollo óptimo del sistema radicular y, posteriormente, durante la época de formación y engorde del fruto. En los terrenos enarenados la raíz evolucione preferentemente en la capa de materia orgánica situada entre la arena y la tierra, por lo que habrá que mantener una humedad estable en esta zona, que normalmente se consigue regando con una frecuencia de cada 2 días. Cuando el cultivo es adulto, con una altura superior a la del tutor, aquel sombrea al suelo, coincidiendo con una amortiguación de las temperaturas a la entrada del otoño, por lo que puede disminuirse la frecuencia, regando cada 3 o 4 días con los mismos volúmenes. Cuando las aguas son de mala calidad los riegos se realizarán a diario, para evitar problemas de salinidad, manteniendo la lectura del tensiómetro en 10-15 cb para no producir asfixia radicular.
En cultivo hidropónico el riego está automatizado y existen distintos sistemas para determinar las necesidades de riego del cultivo, siendo el más extendido el empleo de bandejas de riego a la demanda. El tiempo y el volumen de riego dependerán de las características físicas del sustrato.
En cuanto a la nutrición, cabe destacar la importancia de la relación N/K a lo largo de todo el ciclo de cultivo, que suele ser de 1/0,7 desde el trasplante hasta la cuarta-quinta semana, cambiando hacia 1/1 hasta el comienzo del engorde del fruto y posteriormente hasta 1/3.
El fósforo juega un papel relevante en las etapas de enraizamiento y floración, ya que es determinante sobre la formación de raíces y sobre el taño de las flores.
El calcio es un elemento determinante en la calidad y favorece una mejor defensa de las plantas frente a enfermedades.
Los microelementos van a incidir notoriamente en el color de la fruta, su calidad y la resistencia de la planta, principalmente el hierro y manganeso.
A la hora de abonar, existe un margen muy amplio de abonado en el que no se aprecian diferencias sustanciales en el cultivo, pudiendo encontrar “recetas” muy variadas y contradictorias dentro de una misma zona, con el mismo tipo de suelo y la misma variedad. No obstante, para no cometer grandes errores, no se deben sobrepasar dosis de abono total superiores a 2g.l-1, siendo común aportar 1g.l-1 para aguas de conductividad próxima a 1mS.cm-1.
Actualmente se emplean básicamente dos métodos para establecer las necesidades de abonado: en función de las extracciones del cultivo, sobre las que existe una amplia y variada bibliografía, y en base a una solución nutritiva “ideal” a la que se ajustarán los aportes previo análisis de agua. Este último método es el que se emplea en cultivos hidropónicos, y para poder llevarlo a cabo en suelo o en enarenado, requiere la colocación de sondas de succión para poder determinar la composición de la solución del suelo mediante análisis de macro y micronutrientes, CE y pH.
Los fertilizantes de uso más extendido son los abonos simples en forma de sólidos solubles (nitrato cálcico, nitrato potásico, nitrato amónico, fosfato monopotásico, fosfato monoamónico, sulfato potásico, sulfato magnésico) y en forma líquida (ácido fosfórico, ácido nítrico), debido a su bajo coste y a que permiten un fácil ajuste de la solución nutritiva, aunque existen en el mercado abonos complejos sólidos cristalinos y líquidos que se ajustan adecuadamente, solos o en combinación con los abonos simples, a los equilibrios requeridos en las distintas fases de desarrollo del cultivo.
El aporte de microelementos, que años atrás se había descuidado en gran medida, resulta vital para una nutrición adecuada, pudiendo encontrar en el mercado una amplia gama de sólidos y líquidos en forma mineral y en forma de quelatos, cuando es necesario favorecer su estabilidad en el medio de cultivo y su absorción por la planta.
También se dispone de numerosos correctores de carencias tanto de macro como de micronutrientes que pueden aplicarse vía foliar o riego por goteo, aminoácidos de uso preventivo y curativo, que ayudan a la planta en momentos críticos de su desarrollo o bajo condiciones ambientales desfavorables, así como otros productos (ácidos húmicos y fúlvicos, correctores salinos, etc.), que mejoran las condiciones del medio y facilitan la asimilación de nutrientes por la planta.
Araña roja.
Tetranychus urticae (koch) (ACARINA: TETRANYCHIDAE), T. Turkestani (Ugarov & Nikolski) (ACARINA: TETRANYCHIDAE) y T. ludeni (Tacher) (ACARINA: TETRANYCHIDAE). La primera especie citada es la más común en los cultivos hortícolas protegidos de la provincia de Almería, pero la biología, ecología y daños causados son similares, por lo que se abordan las tres especies de manera conjunta.
Se desarrolla en el envés de las hojas causando decoloraciones, punteaduras o manchas amarillentas que pueden apreciarse en el haz como primeros síntomas. Con mayores poblaciones se produce desecación o incluso de foliación. Los ataques más graves se producen en los primeros estados fenológicos. Las temperaturas elevadas y la escasa humedad relativa favorecen el desarrollo de la plaga. En poroto y sandía con niveles altos de plaga pueden producirse daños en los frutos.
A.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Desinfección de estructuras y suelo previa a la plantación en parcelas con historial de araña roja.
Eliminación de malas hierbas y restos de cultivo.
Evitar los excesos de nitrógeno.
Vigilancia de los cultivos durante las primeras fases del desarrollo.
A.2. Control biológico mediante enemigos naturales
Principales especies depredadoras de huevos, larvas y adultos de araña roja: Amblyseius californicus, Phytoseiulus persimilis (especies autóctonas y empleadas en sueltas), Feltiella acarisuga (especie autóctona).
A.3. Control químico
Materias activas: abamectina, aceite de verano, acrinatrin, amitraz, amitraz + bifentrin, bifentrin, bromopropilato, dicofol, dicofol + tetradifon, dicofol + hexitiazox, dinobuton, dinobuton + tetradifon, dinobuton + azufre, fenbutestan, fenpiroximato, hexitiazox, propargita, tebufenpirad, tetradifón.
B. Araña blanca
Polyphagotarsonemus latus (Banks) (ACARINA: TARSONEMIDAE). Esta plaga ataca principalmente al cultivo de pimiento, si bien se ha detectado ocasionalmente en tomate, berenjena, poroto y pepino. Los primeros síntomas se aprecian como rizado de los nervios en las hojas apicales y brotes, y curvaturas de las hojas más desarrolladas. En ataques más avanzados se produce enanismo y una coloración verde intensa de las plantas. Se distribuye por focos dentro del invernadero, aunque se dispersa rápidamente en épocas calurosas y secas.
B.1. Control químico
Materias activas: abamectina, aceite de verano, amitraz, azufre coloidal, azufre micronizado, azufre mojable, azufre molido, azufre sublimado, azufre micronizado + dicofol, bromopropilato, diazinon, dicofol, endosulfan + azufre, permanganato potásico + azufre micronizado, propargita, tetradifon.
A. Mosca blanca
Trialeurodes vaporariorum (West) (HOMOPTERA: ALEYRODIDAE) y Bemisia tabaci (Genn.) (HOMOPTERA: ALEYRODIDAE). Las partes jóvenes de las plantas son colonizadas por los adultos, realizando las puestas en el envés de las hojas. De éstas emergen las primeras larvas, que son móviles. Tras fijarse en la planta pasan por tres estadios larvarios y uno de pupa, este último característico de cada especie. Los daños directos (amarilleamientos y debilitamiento de las plantas) son ocasionados por larvas y adultos al alimentarse, absorbiendo la savia de las hojas. Los daños indirectos se deben a la proliferación de negrilla sobre la melaza producida en la alimentación, manchando y depreciando los frutos y dificultando el normal desarrollo de las plantas. Ambos tipos de daños se convierten en importantes cuando los niveles de población son altos. Otro daños indirectos se producen por la transmisión de virus. Trialurodes vaporariorun es transmisora del virus del amarilleamiento en cucurbitáceas. Bemisia tabaci es potencialmente transmisora de un mayor número de virus en cultivos ortícolas y en la actualidad actua como transmisora del Virus del rizado amarillo de tomate (TYLCV), conocido como “virus de la cuchara”.
A.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Colocación de mallas en las bandas de los invernaderos.
Limpieza de malas hierbas y restos de cultivos.
No asociar cultivos en el mismo invernadero.
No abandonar los brotes al final del ciclo, ya que los brotes jóvenes atraen a los adultos de mosca blanca.
Colocación de trampas cromáticas amarillas
A.2. Control biológico mediante enemigos naturales
Principales parásitos de larvas de mosca blanca
Trialeurodes vaporariorum. Fauna auxiliar autóctona: Encarsia formosa, Encarsia transvena, Encarsia lutea, Encarsia tricolor, Cyrtopeltis tenuis. Fauna auxiliar empleada en sueltas: Encarsia formosa, Eretmocerus californicus.
Bemisia tabaci. Fauna auxiliar autóctona: Eretmocerus mundus, Encarsia transvena, Encarsia lutea, Cyrtopeltis tenuis. Fauna auxiliar empleada en sueltas: Eretmocerus californicus
A.3. Control químico
Materias activas: alfa-cipermetrin, Beauveria bassiana, bifentrin, buprofezin, buprofezin + metil-pirimifos, cipermetrin + malation, deltametrin, esfenvalerato + metomilo, etofenprox + metomilo, fenitrotion + fenpropatrin, fenpropatrin, flucitrinato, imidacloprid, lambda cihalotrin, metil-pirimifos, metomilo + piridafention, piridaben, piridafention, teflubenzuron, tralometrina.
B. Pulgón
Aphis gossypii (Sulzer) (HOMOPTERA: APHIDIDAE) y Myzus persicae (Glover) (HOMOPTERA: APHIDIDAE). Son las especies de pulgón más comunes y abundantes en los invernaderos. Presentan polimorfismo, con hembras aladas y ápteras de reproducción vivípara. Las formas áptera del primero presentan sifones negros en el cuerpo verde o amarillento, mientras que las de Myzus son completamente verdes (en ocasiones pardas o rosadas). Forman colonias y se distribuyen en focos que se dispersan, principalmente en primavera y otoño, mediante las hembras aladas.
B.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Colocación de mallas en las bandas del invernadero.
Eliminación de malas hierbas y restos del cultivo anterior.
Colocación de trampas cromáticas amarillas.
B.2. Control biológico mediante enemigos naturales
Especies depredadoras autóctonas: Aphidoletes aphidimyza.
Especies parasitoides autóctonas: Aphidius matricariae, Aphidius colemani, Lysiphlebus testaicepes.
Especies parasitoides empleadas en sueltas: Aphidius colemani.
B.3. Control químico
Materias activas: acefato, alfa-cipermetrin, bifentrin, carbosulfan, cipermetrin, cipermetrin + azufre, cipermetrin + fenitrotion, cipermetrin + metomilo, cipermetrin + malation, deltametrin, deltametrin+ heptenofos, endosulfan, endosulfan + metomilo, endosulfan + pirimicarb, esfenvalerato, esfenvalerato + fenitrotion, etofenprox, etofenprox + metomilo, fenitrotion, fenitrotion + fenpropatrin, fenitrotion + fenvalerato, fenpropatrin, fen valerato, flucitrinato, fosalon, imidacloprid, lambda cihalotrin, lindano, lindano + malation, malation, metil-pirimifos, metomilo, metomilo + permetrin, metomilo + piridafention, permetrin, pirimicarb, propoxur.
C. Trips
Frankliniella occidentalis (Pergande) (THYSANOPTERA: THRIPIDAE). Los adultos colonizan los cultivos realizando las puestas dentro de los tejidos vegetales en hojas, frutos y, preferentemente, en flores (son florícolas), donde se localizan los mayores niveles de población de adultos y larvas nacidas de las puestas. Los daños directos se producen por la alimentación de larvas y adultos, sobre todo en el envés de las hojas, dejando un aspecto plateado en los órganos afectados que luego se necrosan. Estos síntomas pueden apreciarse cuando afectan a frutos (sobre todo en pimiento) y cuando son muy extensos en hojas). Las puestas pueden observarse cuando aparecen en frutos (berenjena, poroto y tomate). El daño indirecto es el que acusa mayor importancia y se debe a la transmisión del virus del bronceado del tomate (TSWV), que afecta a pimiento, tomate, berenjena y frijol ( poroto.)
C.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Colocación de mallas en las bandas del invernadero.
Limpieza de malas hierbas y restos de cultivo.
Colocación de trampas cromáticas azules.
C.2. Control biológico mediante enemigos naturales
Fauna auxiliar autóctona: Amblyseius barkeri, Aeolothrips sp., Orius spp.
C.3. Control químico
Materias activas: atrin, cipermetrin, cipermetrin + azufre, cipermetrin+ clorpirifos-metil, cipermetrin + malation, clorpirifos-metil, deltametrin, fenitrotion, formetanato, malation, metiocarb.
D. Minadores de hoja
Liriomyza trifolii (Burgess) (DIPTERA: AGROMYZIDAE), Liriomyza bryoniae (DIPTERA: AGROMYZIDAE), Liriomyza strigata (DIPTERA: AGROMYZIDAE), Liriomyza huidobrensis (DIPTERA: AGROMYZIDAE). Las hembras adultas realizan las puestas dentro del tejido de las hojas jóvenes, donde comienza a desarrollarse una larva que se alimenta del parénquima, ocasionando las típicas galerías. La forma de las galerías es diferente, aunque no siempre distinguible, entre especies y cultivos. Una vez finalizado el desarrollo larvario, las larvas salen de las hojas para pupar, en el suelo o en las hojas, para dar lugar posteriormente a los adultos.
D.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Colocación de mallas en las bandas del invernadero.
Eliminación de malas hierbas y restos de cultivo.
En fuertes ataques, eliminar y destruir las hojas bajas de la planta.
Colocación de trampas cromáticas amarillas.
D.2. Control biológico mediante enemigos naturales
Especies parasitoides autóctonas: Diglyphus isaea, Diglyphus minoeus, Diglyphus crassinervis, Chrysonotomyia formosa, Hemiptarsenus zihalisebessi.
Especies parasitoides empleadas en sueltas: Diglyphus isaea.
D.3. Control químico
Materias activas: abamectina,
E. Orugas
Spodoptera exigua (Hübner) (LEPIDOPTERA: NOCTUIDAE), Spodoptera litoralis (Boisduval) (LEPIDOPTERA: NOCTUIDAE), Heliothis armigera (Hübner) (LEPIDOPTERA: NOCTUIDAE), Heliothis peltigera (Dennis y Schiff) (LEPIDOPTERA: NOCTUIDAE), Chrysodeisis chalcites (Esper) (LEPIDOPTERA: NOCTUIDAE), Autographa gamma (L.) (LEPIDOPTERA: NOCTUIDAE). La principal diferencia entre especies en el estado larvario se aprecia en el número de falsa patas abdominales (5 en Spodoptera y Heliothis y 2 en Autographa y Chrysodeixis), o en la forma de desplazarse en Autographa y Chrysodeixis arqueando el cuerpo (orugas camello). La presencia de sedas (“pelos” largos) en la superficie del cuerpo de la larva de Heliothis, o la coloración marrón oscuro, sobre todo de patas y cabeza, en las orugas de Spodoptera litoralis, también las diferencia del resto de las especies.
La biología de estas especies es bastante similar, pasando por estados de huevo, 5-6 estadíos larvarios y pupa. Los huevos son depositados en las hojas, preferentemente en el envés, en plastones con un número elevado de especies del género Spodoptera, mientras que las demás lo hacen de forma aislada. Los daños son causados por las larvas al alimentarse. En Spodoptera y Heliothis la pupa se realiza en el suelo y en Chrysodeixis chalcites y Autographa gamma, en las hojas. Los adultos son polillas de hábitos nocturnos y crepusculares.
Los daños pueden clasificarse de la siguiente forma: daños ocasionados a la vegetación (Spodoptera, Chrysodeixis), daños ocasionados a los frutos (Heliothis, Spodoptera y Plusias en tomate, y Spodoptera y Heliothis en pimiento) y daños ocasionados en los tallos (Heliothis y Ostrinia) que pueden llegar a cegar las plantas.
E.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Colocación de mallas en las bandas del invernadero.
Eliminación de malas hierbas y restos de cultivo.
En fuertes ataques, eliminar y destruir las hojas bajas de la planta.
Colocación de trampas de feromonas y trampas de luz.
Vigilar los primeros estados de desarrollo de los cultivos, en los que
se pueden producir daños irreversibles.
E.2. Control biológico mediante enemigos naturales
Parásitos autóctonos: Apantelles plutellae.
Patógenos autóctonos: Virus de la poliedrosis nuclear de S. exigua.
Productos biológicos: Bacillus thuringiensis.
E.3. Control químico
Materias activas: acefato, alfa-cipermetrin, amitraz +
bifentrin, Bacillus thuringiensis (delta-endotoxina), .Bacillus thuringiensis
(Var. Kurstaki), Bacillus
thuringiensis (Var. Aizawai), betaciflutrin, bifentrin, ciflutrin, cipermetrin,
cipermetrin + azufre, cipermetrin + fenitrotion, cipermetrin + metomilo,
cipermetrin + malation, clorpirifos, deltametrin, esfenvalerato, esfenvalerato +
fenitrotion, esfenvalerato + metomilo, etofenprox, etofenprox + metomilo,
fenitrotion, fenitrotion + fenpropatrin, fenitrotion + fenvalerato, fenvalerato,
flucitrinato, flufenoxuron, lambda cihalotrin, malation, metil-pirimifos,
metomilo, metomilo + piridafention, metomilo + permetrin, permetrin, propoxur,
tau-fluvalinato, teflubenzuron, tiodicarb,, tralometrina, triclorfon.
Meloidogyne spp. (TYLENCHIDA: HETERODERIDAE). En hortícolas en Almería se han identificado las especies M. Javanica, M. Arenaria y M incógnita. Afectan prácticamente a todos los cultivos hortícolas, produciendo los típicos nódulos en las raíces que le dan el nombre común de “batatilla”.Penetran en las raíces desde el suelo. Las hembras al ser fecundadas se llenan de huevos tomando un aspecto globoso dentro de las raíces. Esto unido a la hipertrofia que producen en los tejidos de las mismas, da lugar a la formación de los típicos “rosarios”. Estos daños producen la obstrucción de vasos e impiden la absorción por las raíces, traduciéndose en un menor desarrollo de la planta y la aparición de síntomas de marchitez en verde en las horas de más calor, clorosis y enanismo. Se distribuyen por rodales o líneas y se transmiten con facilidad por el agua de riego, con el calzado, con los aperos y con cualquier medio de transporte de tierra. Además, los nematodos interaccionana con otros organismos patógenos, bien de manera activa (como vectores de virus), bien de manera pasiva facilitando la entrada de bacterias y hongos por las heridas que han provocado.
A. Métodos preventivos y técnicas culturales
Utilización de variedades resistentes.
Desinfección del suelo en parcelas con ataques anteriores.
Utilización de plántulas sanas.
B. Control biológico mediante enemigos naturales
Productos biológicos: preparado a base del hongo Arthrobotrys irregularis
C. Control por métodos físicos
Esterilización con vapor.
Solarización, que consiste en elevar la temperatura del suelo mediante la colocación de una lámina de plástico transparente sobre el suelo durante un mínimo de 30 días.
D. Control químico
Materias activas: benfuracarb, cadusafos, carbofurano, dicloropropeno, etoprofos, fenamifos, oxamilo.
7.2.1. Enfermedades producidas por hongos
A. Oidiopsis
Leveillula taurica (Lev.) Arnaud. Es un parásito de desarrollo semi-interno y los conidióforos salen al exterior a través de los estomas. En Almería es importante en los cultivos de pimiento y tomate y se ha visto de forma esporádica en pepino. Los síntomas que aparecen son manchas amarillas en el haz que se necrosan por el centro, observándose un fieltro blanquecino por el envés. En caso de fuerte ataque la hoja se seca y se desprende. Las solanáceas silvestres actuan como fuente de inóculo. Se desarrolla a 10-35 ºC con un óptimo de 26 ºC y una humedad relativa del 70 %.
A.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Eliminación de malas hierbas y restos de cultivo.
Utilización de plántulas sanas.
A.2. Control químico
Materias activas: azufre coloidal, azufre micronizado, azufre mojable, azufre molido, azufre sublimado, bupirimato, ciproconazol, ciproconazol + azufre, dinocap, dinocap + azufre coloidal, fenarimol, hexaconazol, miclobutanil, miclobutanil + azufre, nuarimol, penconazol, pirifenox, quinometionato, triadimefon, triadimenol, triforina.
B. “Ceniza” u oidio de las cucurbitáceas
Sphaerotheca fuliginea (Schelecht) Pollacci. ASCOMYCETES: ERYSIPHALES.
Los síntomas que se observan son manchas pulverulentas de color blanco en la superficie de las hojas (haz y envés) que van cubriendo todo el aparato vegetativo llegando a invadir la hoja entera, también afecta a tallos y peciolos e incluso frutos en ataques muy fuertes. Las hojas y tallos atacados se vuelven de color amarillento y se secan. Las mala hierbas y otros cultivos de cucurbitáceas, así como restos de cultivos serían las fuentes de inóculo y el viento es el encargado de transportar las esporas y dispersar la enfermedad. Las temeperaturas se sitúan en un margen de 10-35 ºC, con el óptimo alrededor de 26 ºC. La humedad relativa óptima es del 70 %. En melón se han establecido tres razas (Raza 1,2 y 3,) destacándose en Málaga y Almería las razas 1 y 2.
B.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Eliminación de malas hierbas y restos de cultivo.
Utilización de plántulas sanas.
Realizar tratamientos a las estructuras.
Utilización de las variedades de melón con resistencias parciales a las dos razas del patógeno.
B.2. Control químico
Materias activas: azufre coloidal, azufre micronizado, azufre mojable, azufre molido, azufre sublimado, bupirimato, ciproconazol, ciproconazol + azufre, dinocap, dinocap + fenbuconazol, dinocap + miclobutanil, dinocap + azufre coloidal, etirimol, fenarimol, hexaconazol, imazalil, miclobutanil, nuarimol, nuarimil + tridemorf, penconazol, pirazofos, propiconazol, quinometionato, tetraconazol, triadimefon, triadimenol, tridemorf, triflumizol, triforina.
C.
Podredumbre gris
Botryotinia fuckeliana (de Bary) Whetrel. ASCOMYCETES: HELOTIALES. Anamorfo: Botrytis cinerea Pers.
Parásito que ataca a un amplio número de especies vegetales, afectando a todos los cultivos hortícolas protegidos de Almería y que puede comportarse como parásito y saprofito. En plántulas produce Damping-off. En hojas y flores se producen lesiones pardas. En frutos se produce una podredumbre blanda (más o menos acuosa, según el tejido), en los que se observa el micelio gris del hongo. Las principales fuentes de inóculo las constituyen las conidias y los restos vegetales que son dispersados por el viento, salpicaduras de lluvia, gotas de condensación en plástico y agua de riego. La temperatura, la humedad relativa y fenología influyen en la enfermedad de forma separada o conjunta. La humedad relativa óptima oscila alrededor del 95 % y la temperatura entre 17 ºC y 23 ºC.. Los pétalos infectados y desprendidos actúan dispersando el hongo.
C.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Eliminación de malas hierbas, restos de cultivo y plantas infectadas.
Tener especial cuidado en la poda, realizando cortes limpios a ras del tallo. A ser posible cuando la humedad relativa no es muy elevada y aplicar posteriormente una pasta funguicida.
Controlar los niveles de nitrógeno.
Utilizar cubiertas plásticas en el invernadero que absorban la luz ultravioleta.
Emplear marcos de plantación adecuados que permitan la aireación.
Manejo adecuado de la ventilación y el riego.
C.2.
Control químico
Materias
activas: benomilo, captan, captan + tiabendazol, carbendazima, carbendazima +
dietofencarb, carbendazima + vinclozolina, carbendazima + quinosol + oxinato de
cobre, clortalonil, clortalonil + maneb, clortalonil + metil-tiofanato,
clortalonil + tiabendazol, clortalonil + óxido cuproso, clortalonil +
procimidona, clozolinato, diclofluanida, diclofluanida + tebuconazol, folpet,
folpet + sulfato cuprocálcico, iprodiona, mancozeb + metil-tiofanato,
metil-tiofanato, pirimetanil, procimidona, propineb, tebuconazol, tiabendazol,
tiabendazol + tiram, tiram.
D. Podredumbre blanca
Sclerotinia sclerotiorum (Lib) de Bary. ASCOMYCETES: HELOTIALES. Anamorfo: no se conoce.
Hongo polífago que ataca a todas las especies hortícolas cultivadas en Almería. En lántulas produce Damping-off. En planta produce una podredumbre blanda (no desprende mal olor) acuosa al principio que posteriormente se seca más o meno según la suculencia de los tejidos afectados, cubriéndose de un abundante micelio algodonoso blanco, observándose la presencia de numerosos esclerocios, blancos al principio y negros más tarde. Los ataques al tallo con frecuencia colapsan la planta, que muere con rapidez, observándose los esclerocios en el interior del tallo. La enfermedad comienza a partir de esclerocios del suelo procedentes de infecciones anteriores, que germinan en condiciones de humedad relativa alta y temperaturas suaves, produciendo un número variable de apotecios. El apotecio cuando está maduro descarga numerosas esporas, que afectan sobre todo a los pétalos. Cuando caen sobre tallos, ramas u hojas producen la infección secundaria.
D.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Eliminación de malas hierbas, restos de cultivo y plantas infectadas.
Utilizar cubiertas plásticas en el invernadero que absorban la luz ultravioleta.
Emplear marcos de plantación adecuados que permitan la aireación.
Manejo adecuado de la ventilación y el riego.
Solarización.
D.2. Control químico
Materias activas: captan + tiabendazol, clozolinato, procimidona, tebuconazol, tiabendazol + tiram, tiram + tolclofos-metil, tolclofos-metil, vinclozolina.
E. Chancro gomoso del tallo
Didymella bryoniae (Auersw) REM. ASCOMYCETES: DOTHIDEALES. En Almería se ha encontrado en melón, sandía, calabacín y pepino. En plántulas afecta principalmente a los cotiledones en los que produce unas manchas parduscas redondeadas, en las que se observan puntitos negros y marrones distribuidos en forma de anillos concéntricos. El cotiledón termina por secarse, produciendo lesiones en la zona de la inserción de éste con el tallo. Los síntomas más frecuentes en melón, sandía y pepino son los de “chancro gomoso del tallo” que se caracterizan por una lesión beige en tallo, recubierta de picnidios y/o peritecas, y con frecuencia se producen exudaciones gomosas cercanas a la lesión. En la parte aérea provoca la marchitez y muerte de la planta. En calabacín estas manchas beige aparecen también en peciolos y nervios de la hoja, observándose también unas manchas en el limbo de aloja que al principio son de color amarillo y se agrandan rápidamente volviéndose de color marrón. Con frecuencia el interior de esta mancha se rompe, quedando perforada. En cultivos de pepino y calabacín se producen ataques al fruto, que se caracterizan por estrangulamiento de la zona de la cicatriz estilar, que se recubre de picnidios. Puede transmitirse por semillas. Los resto de cosecha son una fuente primaria de infección y las esporas pueden sobrevivir en el suelo o en los tallos y en la estructura de los invernaderos, siendo frecuentes los puntos de infección en las heridas de podas e injertos. La temperatura de desarrollo de la enfermedad es de 23-25 ºC, favorecido con humedades relativas elevadas, así como exceso de abono nitrogenado. Las altas intensidades lumínicas la disminuyen.
E.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Utilizar semilla sana.
Eliminar restos de cultivo tanto alrededor como en el interior de los invernaderos.
Desinfección de las estructuras del invernadero.
Control de la ventilación para disminuir la humedad relativa.
Evitar exceso de humedad en suelo. Retirar goteros del pie de la planta.
Deben sacarse del invernadero los frutos infectados y los restos de poda.
Realizar la poda correctamente.
E.2. Control químico
Materias activas: benomilo, metil-tiofanato, procimidona..
A.
Podredumbre blanda.
Erwinia carotovora subsp. Carotovora (Jones) Bergey et al.
Bacteria polífaga que ataca a todas las especies hortícolas cultivadas en
Almería. Penetra por heridas e invade tejidos medulares, provocando
generalmente podredumbres acuosas y blandas que suelen desprender olor
nauseabundo. Externamente en el tallo aparecen manchas negruzcas y húmedas. En
general la planta suele morir En frutos también puede producir podredumbres
acuosas. Tiene gran capacidad saprofítica, por lo que puede sobrevivir en el
suelo, agua de riego y raíces de malas hierbas. Las condiciones favorables para
el desarrollo de la enfermedad son altas humedades relativas y temperaturas
entre 25 y 35 ºC.
A.1. Métodos preventivos y técnicas culturales
Eliminación de malas hierbas, restos de cultivo y plantas infectadas.
Evitar heridas de poda.
Manejo adecuado de la ventilación y el riego.
Desinfectar los aperos con una dilución de lejía al 20 %.
No abonar con exceso de nitrógeno.
Elegir marcos de plantación adecuados para una buena ventilación.
A.2. Control químico
Los tratamientos químicos son poco eficaces una vez instalada la enfermedad en la planta, por lo que es mejor utilizar métodos culturales.
VIRUS |
Síntomas en hojas |
Síntomas en frutos |
Transmisión |
Métodos de lucha |
AMARILLEAMIENTOS |
Mosaico amarillo en las zonas internerviales, con los nervios de color verde normal |
Reducción del crecimiento |
Trialeurodes vaporariorum Bemisia tabaci |
Eliminación de malas hierbas Protección de semilleros Control del vector |
MNSV (Melon Necrotic Spot Virus) (Virus del Cribado del Melón) |
- Pequñas lesiones necróticas |
- No sehan observado síntomas |
-.Hongos de suelo (Olpidium radicale) - Semillas (solo con presencia de Olpidium en el suelo) |
- Utilizar plantas injertadas. |
ZYMV (Zucchini Yellow Mosaic Virus) (Virus de Mosaico Amarillo del Calabacín) |
- Manchas verde oscuro a lo largo de los nervios - Abollonaduras Asimetría del limbo foliar -Mosaicos |
- Abollonaduras - Mosaicos - Deformaciones |
- Pulgones |
- Control de pulgones. - Eliminación de malas hierbas - Eliminación de plantas afectadas |
CMV (Cucumber Mosaic Virus) (Virus del Mosaico del Pepino) |
- Mosaico - Deformaciones
|
- Mosaicos a veces deformantes - Manchas |
- Pulgones |
- Control de pulgones. - Eliminación de malas hierbas - Eliminación de plantas afectadas |
WMV-2 (Watermelon Mosaic Virus-2) (Virus de Mosaico de la Sandía) |
- Mosaicos muy suaves y deformaciones en el limbo |
|
- Pulgones |
- Eliminación de malas hierbas - Eliminación de plantas afectadas |
8.1. QUEMADOS DE LA ZONA APICAL DEL PEPINO
Se produce por “golpe de sol” o por excesiva transpiración.
Rajas longitudinales de poca profundidad que cicatrizan pronto que se producen en épocas frías con cambios buscos de humedad y temperatura entre el día y la noche.
8.3. CURVADO Y ESTRECHAMIENTO DE LA PUNTA DE LOS FRUTOS
El origen de esta alteración no está muy claro, aunque influyen diversos factores: abonado inadecuado, deficiencia hídrica, salinidad, sensibilidad de la variedad, trips, altas temperaturas, exceso de producción, etc.
Se produce un aclareo de frutos de forma natural cuando están recién cuajados: los frutos amarillean, se arrugan y abortan. Se debe a una carga excesiva de frutos, déficit hídrico y de nutrientes.
Parte desde la cicatriz estilar y avanza progresivamente hasta ocupar gran parte de la piel del fruto. Las causa pueden ser: exceso de nitrógeno, falta de luz, exceso de potasio, conductividad muy alta en el suelo, fuertes deshidrataciones, etc.