EL CULTIVO DE LA PAPA

 

1.TAXONOMÍA Y MORFOLOGÍA. 

 2.EXIGENCIAS DEL CULTIVO.

 3.ABONADO.

 4.PRACTICAS DE CULTIVO.

 5.PLAGAS DE LA PAPA.

 6.ENFERMEDADES DE LA PAPA

 

1.Taxonomía y morfología.

 La papa (Solanum tuberosum) pertenece a la familia de las solanáceas. Es una planta dicotiledónea. Su cultivo se halla extendido por todo el mundo a excepción de los países tropicales.

 La papa fue introducida en España en 1565, siendo nuestro país el centro de expansión del tubérculo a toda Europa. El gran incremento del cultivo fue a principios del siglo XIX.

 La papa es planta herbácea anual. Sus raíces son muy ramificadas, finas y largas, dependiendo su desarrollo de que el suelo esté o no mullido.

 El tallo, grueso, fuerte, anguloso, con una altura que varía entre 0,5 y 1 m, se origina en las yemas del tubérculo. Las hojas son imparipinnadas. Consta de nueve o más foliolos, cuyo tamaño es tanto mayor cuanto más alejados se encuentran del nudo de inserción.

 El fruto es una baya redondeada de color verde, que se vuelve amarilla al madurar.

 A la vez que tallos aéreos, la planta tiene tallos subterráneos. Los primeros son de color verde. Contienen un alcaloide tóxico, la solanina, que puede formarse también en los tubérculos cuando éstos se exponen prolongadamente a la luz.

 Los tallos subterráneos o estolones, relativamente cortos, se convierten en su extremidad en tubérculos.

 En la superficie de los tubérculos tienen yemas distribuidas en forma helicoidal, abundando sobre todo en la parte opuesta al punto de inserción sobre el estolón.

 Aunque la papa puede multiplicarse por semillas y por esquejes, en la práctica, la multiplicación es siempre vegetativa, haciéndose por medio de los tubérculos que producen brotes en las yemas u ojos.

 La germinación de la papa, su crecimiento y la producción de tubérculos depende de sustancias químicas elaboradas por la papa, que actúan en dosis muy débiles. Se les conoce con el nombre de “sustancias de tuberización”.

 La formación de sustancias de tuberización por hojas y tallos depende de la variedad y, también, de la temperatura y de la duración de la luz diaria (fotoperiodo). En días cortos se producen más sustancias de tuberización que en días largos, en los cuales aumenta el crecimiento vegetativo de la planta.

 En determinadas circunstancias en que hay tuberización y crecimiento, puede ocurrir que, porque existan condiciones meteorológicas favorables, porque se abone con un exceso de fertilizantes nitrogenados u otra circunstancia, la planta puede crecer más deprisa que se produce la sustancia de tuberización, cayendo entonces la concentración de ésta por debajo del nivel mínimo y deteniéndose la tuberización. Cuando se elabora más sustancia de tuberización, vuelve a retrasarse el crecimiento y aparece nuevamente la tuberización. Estamos entonces en el caso de “rebrote”.

 Se ha demostrado que el vigor del crecimiento de la planta está estrechamente unido al de los brotes de los cuales proceden. Por eso tiene gran interés plantar tubérculos cuyos brotes han alcanzado una fase de crecimiento activo, obteniéndose entonces una nascencia rápida y vigorosa.

 Si los tubérculos se encuentran en una fase de crecimiento lento, entonces, no nace generalmente más que un solo brote en el ápice del tubérculo (dominancia apical).

2.Exigencias del cultivo.

 La papa es planta que requiere humedad abundante  y regular. Aunque es España se da en secano, sólo se obtienen buenas producciones en riego, con excepción de la cornisa cantábrica y Galicia, donde las lluvias son siempre abundantes.

 Vegeta bien donde hay temperaturas templadas y humedad ambiente. Sufre con las temperaturas excesivas y es particularmente sensible a la sequía. Sin embargo, la humedad, del aire favorece los ataques de mildiu, por lo que debe tenerse en cuenta esta circunstancia. Es más exigente en agua que la remolacha. En periodo de intensa tuberización puede necesitar hasta 80 metros cúbicos de agua por ha y día.

 Se hiela a temperaturas inferiores a –2 ºC. El crecimiento de los brotes empieza a los 2 ºC y es máximo entre 20 y 25 ºC.

 Aunque es muy exigente en agua, un exceso de ésta produce disminución de su riqueza en fécula y favorece el desarrollo de enfermedades, tales como el mildiu y podredumbre.

 En cuanto a suelos, la papa prefiere tierras mullidas y aireadas. Son mejores los suelos arenosos que los arcillosos. Vegeta mejor entre valores de pH comprendidos entre 5,5 y 7, condiciones que suelen darse más en los terrenos arenosos. Es planta que tolera una fuerte acidez (pH=5).

 Puede vegetar también en terrenos arcillo-calizos, llegando a tolerar un pH igual e incluso superior a 8. En suelos calizos es donde son más frecuentes los ataques de sarna.

 Son indicados los suelos ricos en humus o materia orgánica; en cambio, son malos los suelos fuertes y compactos.

3.Abonado.

 La papa responde muy bien a las aportaciones orgánicas. Por otra parte, un estercolado mejora las condiciones físicas del suelo, lo que beneficia el desarrollo del tubérculo.

 El estiércol debe ser incorporado algún tiempo antes de la siembra para que no favorezca el desarrollo de las enfermedades, sobre todo la sarna.

 Cuando no se haya estercolado previamente, y para una producción de 30.000 kg, un buen abonado puede ser, por hectárea cultivada, de 150 unidades de N, 100 unidades de P2O5 y 300 unidades de K2O.

 Estas cantidades pueden disminuir sensiblemente, si se cultiva después de una leguminosa, si existían cantidades en el suelo de materia orgánica, fósforo o potasio, etc.

 Como ya sabemos, las funciones del ácido fosfórico en la planta son: adelantar la madurez, aumentar la riqueza en fécula de la papa y favorecer el desarrollo radicular. En cambio, el potasio, favorece la formación de azúcares, la asimilación clorofílica y facilita la migración de la fécula de los órganos verdes a los tubérculos.

 Se puede hacer una enmienda de cal, pues ésta favorece el desarrollo de la papa, pero esta enmienda debe hacerse 1 ó 2 años antes de la siembra pues si se hace antes puede producir sarna común.

 Algunas veces la papa acusa la carencia de magnesio, aunque normalmente los estiércoles suelen contener este elemento. Hay que tener cuidado con los abonos cuantiosos de potasio, pues bloquean al magnesio.Los abonos, conviene que lleven azufre, pues la papa es bastante exigente en este elemento; así, abonaremos principalmente con superfosfatos, sulfatos, etc.

4.Practicas de cultivo.

La papa requiere un terreno bastante mullido, así que las labores preparatorias del terreno serán en profundidad, y de tal manera que el terreno quede muy fino.

Se recomienda hacer estercolado previo y que éste sea muy hecho. La dosis óptima se encuentra entre 25-30 tm de estiércol por hectárea. Si se sobrepasase esta cifra se obtendría un desarrollo de vegetación exagerado  (no deseado) y una reducción de la tuberización.

El agricultor para sembrar, puede elegir entre hacerlo con las papas más pequeñas de la campaña anterior, o adquirir papas de siembra, que son las que están declaras aptas por el Ministerio de Agricultura y están controladas por la Subdirección General de semillas.

Estas papas están etiquetadas y precintadas y en ellas se han reconocido las condiciones de sanidad (libres de virus), vigor vegetativo y pureza varietal.

Dentro de las papas existe lo que se llama la papa precoz, la tardía y la semitemprana.

Precoz: su ciclo es menor de 120 días.

Tardía: o papa de ciclo largo. Ciclo de 150 días.

Semitemprana: su ciclo está comprendido entre los 120 y los 150 días.

La dosis adecuada de semilla utilizada en la plantación varía entre los 2.000 y los 2.500 kg por ha. Cada papa, o trozo de la misma debe tener un mínimo de dos yemas. Se trata de conseguir una dessidad de plantas de 55.000 a 65.000 plantas/ha. Se pueden poner dos tipos de marcos para esta densidad de plantación: 75 cm x 25 cm ó 80 cm x 20 cm.

La profundidad de la plantación puede ir desde los 5 a los 15 cm, dependiendo del tipo de suelo, aunque lo más normal es que se ponga a una profundidad de unos 7-8 cm; después de nacida se irán haciendo aporcados sucesivos.

La siembra se puede hacer a mano (ya en desuso), con el arado (haciendo la siembra cada dos surcos, aunque cada vez se utilizan más las máquinas sembradoras que pueden ser arrastradas por el tractor o ir suspendidas.

Después de la siembra, es conveniente hacer un rulado para aplastar la tierra alrededor de la simiente

Otra práctica habitual en el cultivo de la papa es hacer escardas a mano para destruir malas hierbas, aunque también se pueden utilizar herbicidas como:

En presiembra: Clortal, EPTC, Metribuzín.

En preemergencia del cultivo: Aclorifén, Alacloro + Linurón, Cianazina, Clortal, Metolacloro, Prometrina, Pracuat...

En postemergencia del cultivo: Bentazona, Cicloxidim, Haloxifop, etc.

Referente a las necesidades de agua, la planta no debe pasar sed en ningún momento, pero sobre todo en la nascencia. Según Briccoli, una falta de agua en la nascencia podría reducir el rendimiento de la planta a la cuarta parte.

Por otra parte el exceso de humedad tampoco es bueno, pues, detiene el desarrollo de los tubérculos y favorece enfermedades criptogámicas como el mildiu o la podredumbre (de ahí que la papa prefiera los suelos sueltos y bien drenados).

La recolección puede hacerse a mano o con máquina. Actualmente a mano solamente se hace en las parcelas pequeñas, pero lo normal es que salga más caro. Las máquinas, tienen un rendimiento aproximado de unas 3 tm por hora. Como una cosecha normal ronda los 25.000 kg/ha, se puede decir que una máquina arrancadora-hileradora trabaja una hectárea diaria aproximadamente.

La arrancadora hileradora de dos hileras, tiene un rendimiento del doble de la anterior.

5.Plagas de la papa.

Escarabajo de la papa (Leptinotarsa decemlineatacoleóptero devoran ferozmente las hojas, pudiendo destruir toda): las larvas de este una plantación dejando sólo los tallos de las plantas. Los productos recomendados para tratar (en cuanto aparezcan las primeras larvas) esta plaga son:

Acefato, Malation, Carbosulfán, Triclorfon, Clorpirifos, Temefos, Fenvalerato, Lindano, Endosulfan, Permetrín

 Pulgones de la papa: sus daños fundamentales son que transmiten enfermedades viróticas. Los pulgones más comunes en la papa son:

 Pulgón verde del duraznero (Myzus persicae)

 Pulgón de estría verde de la papa (Macrosiphum euphorbiae)

 Pulgón de manchas verdes (Aulacorthum solani)

 Estos son los productos más recomendados en su tratamiento:

 Acetato, Benfuracarb, Carbosulfan, Cipermetrín, Clorpirifos, Diazinón, Lambda cihalotrín, Fenitrotión.

 Polilla de la papa: no sólo ataca a la papa sino a otras muchas solanáceas como el pimiento, la berenjena, el tomate o el tabaco.

 Los daños se deben a las galerías que las larvas hacen dentro de los órganos aéreos (en el campo) y a las galerías que hacen en los tubérculos que además son puerta de entrada de enfermedades criptogámicas (en el almacén).

 Tratar las papas almacenadas con Carbaril, Metomilo o Triclorfón.

 Rosquilla negra (Prodenia): es una plaga polífaga, la oruga, que es la que hace el daño, come las partes verdes de la planta. Suelen comer por la noche o en días nublados; tienen carácter gregario y arrasan por donde pasan.

 Los insecticidas que se suelen utilizar son:

 Carbaril, Cipermetrín, Lindano, Endosulfán, Etil azinfos, Malatión.

Araña roja (Tetranichus sp.): los daños de esta plaga se acentúan en días secos y calurosos, pudiendo destruir íntegramente la cosecha. Para luchar contra esta plaga se pueden utilizar: Piridafentión, Metil azinfos, Metidatión o Carbaril + dimetoato.

 Gusanos del suelo (Agrotis segetum): primcipalmente son los denominados gusanos grises y blancos los que devoran los tubérculos. Para acabar con ellos se emplean diversos insecticidas de suelo: Benfuracarb, Carbosulfán, Etoprofos, Tiofanox, Fonotos...

 Alacrán cebollero (Gryllotalpa gryllotalpa): Causa graves daños a la planta de la papa. Lo más normal para combatirlo es utilizar cebos a base de fluosilicato.

 Nematodo dorado (Heterodera rotochiensis): es el nematodo que mayores daños causa en la papa, aunque no el único. Las larvas penetran en las raíces formando quistes de pequeño tamaño. Los nematicidas más utilizados son:

 Los nematicidas más eficaces son el D-D, el Telone, el Nemacur, el Vapam y el Basamid. En cultivos extensivos es raro que se utilicen debido a su elevado

6.Enfermedades de la papa.

 Mildiu de la papa (Phytophtora infestans): es la enfermedad más importante de la papa. Se forman en las hojas unas manchas que al principio son pardas y luego se vuelven negras. Estas manchas empiezan en los bordes de las hojas y van avanzando hacia el centro de las mismas.

 Los tubérculos se contaminan al ponerse en contacto con las hojas atacadas o con conidias que puede haber en la superficie del suelo. Las papas atacadas presentan manchas blancas en la piel que acaban por meterse en la carne. Los tubérculos sanos se contagian de los atacados en el almacén.

 Tratar con alguno de los siguientes productos:

 Preventivos: Captan + zineb, Cobre + folpet, Cobre + Mancoceb, Maneb, Ofurace, Propineb...

 Preventivos y curativos: Benalaxil + mancoceb, Cimoxanilo + mancoceb, Clortalonil, Fosetil Al + mancoceb, Metalaxil + Mancoceb, etc.

 Negrón de la papa (Alternaria solani): este hongo se puede desarrollar también en ambientes secos. No sólo ataca a la papa, sino también al tomate y otras solanáceas silvestres. Los tratamientos son similares a los del Mildiu.

 Otras enfermedades de menor importancia en la papa son:

 Sarna ordinaria o roña de la papa (Actinomyces scabies)

 Fusariosis de la papa (Fusarium solani)

 Viruela de la papa (Rhizoctonia solani)

 Hay otro tipo de enfermedades “degenerativas” que están causadas por virus. Los principales virus que atacan a la papa en España son el virus del “enrollado de la hoja”, el virus Y, el virus A y los virus F y G. Contra estos virus no existen medios de lucha, simplemente habrá que utilizar simiente producida bajo la supervisión del Ministerio de Agricultura, obtenida en las zonas productoras de papa de siembra.

 

INICIO DE PÁGINA                                                                                INDICE DE CULTIVOS

Inicio de Pagina Volver a Indice de Cultivos